Era temprano como para haberlo escuchado y salir a la ventana a observar el procedimiento natural por el cual un avión dividía a su paso el horizonte en dos. Carlos bajó a la calle para constatar, por la base de las edificaciones, que se había quedado en el lugar más tenebroso.
¿Por qué yo?
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No se me ocurre nada. Sin duda fue un buen día. Una buena noche. Me
gustaría decir algo, pero no tengo las palabras. A veces es como
convencerse de que ...
Hace 1 mes
2 comentarios:
hasta lo tenebroso tiene un pequeño hueco para la luz
pero inalcanzable como el horizonte.
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